En un año en el que divide su tiempo entre Buenos Aires y Miami, donde se encuentra desarrollando una plataforma periodística digital de alcance regional que entrará en funcionamiento en 2017, Lanata decidió poner fin a la emisión semanal de «PPT», programa que dirigió entre 2012 y 2015 y que lo situó en un lugar de insoslayable centralidad política.
Artífice de «Página 12» y periodista de toda la vida, Lanata no reniega de su alianza con el Grupo Clarín aunque asegura, parafraseando a Borges, que en su momento los unió el espanto; dice sentirse orgulloso de haberse peleado con todos los presidentes de la democracia al tiempo que augura una futura e inevitable pelea con Mauricio Macri, y señala que «lo más estresante es ser Jorge Lanata en Argentina».
«Sí, obvio, hacer un programa como ‘PPT’ genera estrés pero en principio genera mucho estrés ser yo, ser yo en Argentina genera bastante estrés», contesta en comunicación telefónica con Télam desde Miami, días antes del lanzamiento de «El argentino más inteligente» y hablando sobre las consecuencias de haber estado al frente de un programa que fue la principal oposición discursiva al relato kirchnerista a lo largo de varios años.
«‘A medida que pasaba el tiempo, a ‘PPT’ lo íbamos haciendo con más tranquilidad, pero hubo estrés porque nos metimos en situaciones realmente pesadas, como lo que pasó con la ruta del dinero, porque eso ahora está empezando a tener un epílogo más feliz pero durante mucho tiempo fue una pelea nuestra contra el resto del universo; y eso genera estrés», asegura.
«El estrés viene -continúa- porque soy periodista y me metí con temas que no son cómodos. Yo me peleé con todos los presidentes de la democracia, y eso lo vivo con orgullo, me parece que está bien, es lo que tenía que hacer, yo creo que hay una lógica natural que lleva a que el periodismo se enfrente con el poder».
«Me peleo con Alfonsín, me peleo con Duhalde, con De la Rúa, con Menem, con Néstor obviamente, con Cristina, me pelearé y en parte ya empecé a pelearme con Macri, a medida que avance el gobierno me imagino que nos iremos peleando más. Está bueno que eso pase, es hacer mi laburo y todo eso genera estrés porque estás en el medio de la tormenta», reflexiona.
Sobre las críticas al gobierno actual, dice que ya las hizo públicas y enumera: «se equivocó al comienzo con los decretos de necesidad y urgencia, con el nombramiento de los jueces para la Corte sin pasar por el Congreso, también creo que en el tema de los despidos porque a mi modo de ver cualquier despido masivo siempre es injusto».
También critica a Macri por su respuesta a las revelaciones de las empresas «offshore» que surgieron de la divulgación de los documentos conocidos como Panamá Papers.
«Dio una respuesta jurídica a un problema político y en verdad en ese sentido fue mucho más inteligente lo que hizo Cristina que le dio una respuesta política a un problema jurídico. Hizo exactamente al revés; es obvio que no estoy de acuerdo con lo que hizo Cristina pero si lo analizo objetivamente me parece más inteligente», sentencia.
Consultado sobre si cree haber sido uno de los artífices de la derrota del kirchnerismo, Lanata contesta: «Sería tonto de mi parte decirte que lo de Aníbal Fernández no influyó en la elección, pero Aníbal no perdió la elección por mí, la perdió por él mismo. Yo no me quiero hacer cargo del destino de los demás, bastante tengo con mi destino propio; que la gente se haga cargo de que si acá hubo un cambio es porque la gente lo votó no es porque yo dije tal cosa; todo ayuda, pero el cambio verdadero lo produce la gente cuando va y vota».
Al ser interrogado sobre su relación con el Grupo Clarín, al que durante muchos años había criticado desde el ejercicio de un periodismo más alternativo e independiente, Lanata consigna: «en un momento nos unió el espanto».
«Yo critiqué mucho a Clarín y sigo pensando con razón que Clarín es muy hostil cuando se compite con ellos en todo sentido, desde el punto de vista publicitario, comercial, de distribución, son una máquina de competir muy fuerte y yo siempre hice diarios y competí con ellos», puntualiza.
Pero, al mismo tiempo, recuerda las circunstancias de su alianza con el Grupo: «En un momento el único lugar donde podía trabajar fue Canal 13; en las radios había intentado laburar en Continental y el gobierno operó en España con Telefónica para que me levantaran el contrato que estaba a punto de ser firmado y entonces no me quedó otra que empezar en Mitre, que fue lo que pasó, y tuve suerte porque entré en un horario ridículo de 1 a 3 de la tarde y a los cuatro meses estábamos primeros, habíamos pasado a Radio 10, que hasta entonces a Mitre no le había ocurrido, después todo fue evolucionando, de Mitre fui a Canal 13 y empecé a escribir en el diario».
«Para mí -indica- fue y es una buena experiencia el laburo con el Grupo Clarín. Eran mucho más los prejuicios que yo tenía con ellos que los que ellos tenían conmigo; yo me di cuenta estando ahí adentro que nada es tan coordinado, nada es tan preciso ni unívoco como uno lo ve desde afuera; Clarín es un quilombo, como es un quilombo La Nación, como es un quilombo Ambito, Télam, como es un quilombo todo. A mí nadie me dijo un pomo de nada del contenido de ninguna cosa, me tratan con mucho respeto, mientras eso dure estaré en Clarín, porque esto para mí es un laburo, no tengo la relación que tuve con ‘Página’, o incluso con ‘Crítica’ o ‘Veintitrés’, yo acá estoy laburando, es como si mañana me fuera a laburar a Télam u otro lado, para mí es un laburo, pero un laburo en el que me siento cómodo».
Sobre «El argentino más inteligente», comenta que no siente que haya «un cambio de registro» sino que se parece en parte a lo que hace en la radio «porque si bien hay política e información general es más para arriba, más divertido».
«Yo sentí -confiesa- que ‘PPT’ era un ciclo que se había cerrado y este año no quería ponerme a hacer un programa político semanal; me parece que es mucho mejor salir cuando tenemos algo fuerte, salir de pronto por el noticiero, como ya salió o con un especial».
«Quería meterme -agrega- con algo que no fuera político por un rato; de hecho no tengo problemas con la palabra entretenimiento, yo creo creo que para la tele, los medios electrónicos y la gráfica entretener es una obligación, lo que cuenta es qué medios usas para entretener».
«Y no estoy poniendo -se ufana- a cuatro enanos a que se caguen a trompadas frente a cámaras, sino que me estoy metiendo con temas interesantes, el tema de la inteligencia, de las nuevas inteligencias; de hecho con ‘PPT’ dentro de lo trágico también buscábamos que fuera un programa entretenido».
Lanata cuenta que el nuevo programa es un formato canadiense («Canada’s Smartest Person»), que salió al aire dos años atrás y que explotó de audiencia el año pasado y en el que se ponen en juego las nuevas teorías sobre las inteligencias múltiples.
Hay nueve tipos de inteligencias distintas, cuenta, basado en la teoría de Howard Gardner, a quien entrevistó en Harvard para una serie de documentales que hizo para Turner años atrás.
Están la inteligencia lógica o matemática, la memoria, la kinésica, que se relaciona con la eficiencia del manejo del cuerpo, la inteligencia musical, la visual y la lingüística, entre otras. En el programa se pone a prueba a los concursantes en seis tipos de inteligencia distintas a través de una serie de juegos que deben sortear.
«El programa está buenísimo, es divertido y es original», resume Lanata sobre el envío que desde este miércoles a las 22.30 irá por la pantalla de El Trece.
