El Tribunal Oral de Audiencia de Santa Rosa, integrado por los jueces Andrés Olié, Carlos Besi, y Gastón Boulenaz, condenó hoy a José Alejandro Weber a 20 años de prisión por el intento de femicidio de su ex pareja, Angelina Baiotti, el 30 de mayo de 2015 cuando le disparó un balazo de escopeta por la espalda en pleno centro santarroseño. El caso tomó trascendencia nacional y se convirtió en uno de los emblemas de la histórica marcha del 3 de junio pasado bajo el lema “Ni una menos”.
Baiotti pasó varios días internada en cuidados intensivos y logró recuperarse sin secuelas físicas del ataque. Estuvo inconsciente en coma 4 por una semana y hoy pudo asistir a la lectura de la sentencia.
El fallo le achacó a Weber los delitos de amenazas con arma -cuchillo- (artículo 149 bis, primer párrafo, segundo apartado, primer supuesto del Código Penal), en concurso real con homicidio calificado por haber mantenido con la víctima una relación de pareja, por alevosía, mediando violencia de género y mediante la utilización de un arma de fuego, (artículos 80 incisos 1, 2 y 11 y 41 bis, primer párrafo), en grado de tentativa; concursando a su vez de manera material con el de portación ilegal de arma de fuego de uso civil (189 bis inciso 2, tercer párrafo).
El hecho provocó una relevante repercusión en la opinión pública pampeana y nacional y fue el puntapié para el inicio de varias marchas por el “Ni una menos” en Santa Rosa y en diferentes puntos de nuestra provincia. La fiscala Cecilia Martini había pedido la pena de 25 años de prisión para el acusado.
Alejandro Weber intentó matar a su pareja porque, según declaró en el juicio el condenado, estaba coloso de su expareja, Angelina Baiotti, con quien tiene dos hijas en común. Al atardecer aquel sábado, la persiguió, se bajó del auto y le disparó por la espalda con una escopeta, mientras caminaba por la calle Moreno al 200, entre Yrigoyen y Lagos, a 3 cuadras de la plaza San Martín, el espacio verde característico de la capital pampeana.
Weber fue detenido y, pese a que en esos momentos se negó a declarar, las pruebas dieron que tenía pólvora en sus manos. Con anterioridad, el 1º de mayo de 2015, la había amenazado con un cuchillo, incidente que desencadenó la separación.
El lunes 1 de junio, el juez Daniel Ralli dictó la prisión preventiva y le informó que estaba acusado de intento de homicidio agravado por el vínculo, alevosía y femicidio. Desde entonces se mantiene detenido.
A fines de octubre de 2015, Angelina Baiotti denunció que recibió amenazas desde la cárcel. La joven explicó que sus hijas recibieron cartas en tono amenazante hacia ella, además de referirse con desprecio hacia su forma de vida. “Llegaron dos cartas que venían selladas con las iniciales de las nenas y en ellas había dos renglones para mis hijas, y luego era todo para mí. Él me pide que se las deje ver, que haga mi vida y luego acoso y acoso. A mí eso me genera miedo, porque sabe de mi vida cosas que no tiene por qué saber”, expresó en aquella oportunidad a Plan B Noticias.
El fallo fue presenciado por organizaciones feministas que celebraron la cuantía de la pena frente a Weber, a quien despidieron al grito de “asesino, asesino” y a pocos días de la nueva marcha “Ni una menos” repitieron el slogan de la versión 2016, “vivas nos queremos”.