El fiscal en la causa conocida como Sub Zona 14 II criticó el discurso oficial que pretende instalar la teoría de los dos demonios o polemiza por el número de desaparecidos. Opinó que el juicio podría iniciarse en junio o julio y aseguró que “aquí hubo crímenes de lesa humanidad, efectuados por un estado terrorista”.
El fiscal Alejandro Cantaro fue muy crítico con la gestión de Mauricio Macri y sus políticas de Derechos Humanos al afirmar que hay discusiones que deben estar zanjadas. “ El Estado tiene reglas muy precisas que en la Argentina no se cumplieron. Hubo una política de exterminio generalizada y aquí en La Pampa, se va a poder demostrar esto”, precisó.
Cantaro explicó que se informó sobre cómo se desarrollará el juicio, respecto de citaciones y declaraciones de testigos, días en los que funcionará el tribunal para hacer el juzgamiento. “Todas cuestiones formales donde las partes, tanto defensa como fiscalía, tienen que opinar o suscribir lo que el tribunal decide o propone, o hacer algún comentario al respecto”.
“Lo único que no quedó claro y que hubiera sido muy importante es que estos jueces que integran otros tribunales orales en otros juicios de lesa humanidad, decidan la fecha en que va a comenzar y con qué continuidad se hará: si serán dos o tres días por semana, toda la semana o semana de por medio, ya que esto define las declaraciones”, explicó.
“Hay que recordar que son 300 testigos que van a declarar y esto es muy importante, ya que suelen haber declaraciones que son particularmente muy emotivas, en quien es testigo y además ha sido víctima en estos crímenes y es un momento de reconstrucción histórica y personal”, dijo.
“Faltó esa fecha, pero creo que el resto de las cuestiones se planteó bien, donde las partes, la defensa y la fiscalía hemos mostrado qué tenemos y cómo vamos a encarar esto”, afirmó.
—¿Será este año el juicio?
—Yo estoy seguro que va a ser este año y le diría que puede ser luego del receso de invierno, no me parece que mucho más allá. Yo desearía que fuese en junio la fecha, pero si no será en el receso de invierno.
—¿Con este juicio se cierra la etapa o quedan testimonios afuera?
—Todavía hay una tercera causa, de delitos que fueron apareciendo con los juzgamientos anteriores, como ciertos abusos sexuales denunciados por las víctimas. Y en varios de estos imputados, se han dictado su procesamiento, en una tercera causa que actualmente está en la Cámara Federal de Bahía Blanca donde las defensas están discutiendo las razones que la jueza tuvo para dictar un procesamiento en esa tercera causa. Una vez que eso esté resuelto, se podría ampliar el objeto de este juicio y hacer un solo juicio. De no suceder, habrá otro juicio, sí.
—Como dato histórico, está la presencia de Baraldini, que estuvo prófugo en el juicio anterior y que hay personas que actuaron en el ámbito civil…
—Son dos datos muy relevantes. Baraldini era el jefe de la Sub Zona 14, era muy importante en la estructura de poder y reprochado de juicios, donde subordinados suyos fueron condenados por penas gravísimas y este segundo paso, es muy relevante, sobre todo en los países que han elegido como modo de solución de los conflictos de los crímenes de estado, el juzgamiento. La Argentina es el único país del mundo que ha decidido resolver los crímenes de lesa humanidad a través de juicios y no optó por el olvido, la amnistía, ni el perdón o la conciliación.
El fiscal Alejandro Cantaro destacó que la Argentina haya elegido el juzgamiento. “Y en este juzgamiento, no se puede acotar a las fuerzas de seguridad de los sectores militares, sino a los civiles que aprovecharon también el enriquecimiento económico y posicionamientos de poder, es decir sectores civiles, judiciales y empresariales y aquí es una muestra de que deben ser juzgados”, agregó.
—¿Cambia en algo este tipo de juicios, con el cambio político producido hace más de un año y su mirada a los Derechos Humanos?
—Totalmente. El juzgamiento de estos hechos hoy es distinto al que hace unos años atrás. Uno lo percibe. La reinstalación en el discurso de la comunidad de la teoría de los dos demonios, que solo hubo exceso, que los desaparecidos no son 30.000, que el número no es relevante y que solo se juzga a uno y no a otro, son discusiones que debieran estar zanjadas.
Cantaro agregó: “esto es una política de Estado y es importante que sigamos con esto. Le vamos a peticionar al tribunal que el juicio se haga los jueves y viernes, para quedarnos en La Pampa y poder dar talleres en los colegios. Hemos hablado ayer con el rector de la Universidad y la secretaría de Derechos Humanos tenga esa trascendencia, que la comunidad esté discutiendo este tema”, dijo.
“Y discutir, significa que hay debates que no nos podemos dar y se deben instalar en términos educativos. Aquí hubo crímenes de lesa humanidad, efectuados por un Estado terrorista, esto no es una cuestión que se pueda apreciar sí o no. El Estado tiene reglas muy precisas que en la Argentina no se cumplieron. Hubo una política de exterminio generalizada y aquí en La Pampa, se va a poder demostrar esto, porque en nuestros casos que vamos a presentar, donde no hubo ni desaparecidos ni muertos pampeanos en La Pampa, podemos demostrar que hubo 300 casos de privaciones ilegales de la libertad, de torturas, de secuestros, de personas que se les exigía y torturaba para conocer militantes de otros lugares y esto confirma la realización de un plan generalizado y sistemático de exterminio. Y nosotros lo queremos resaltar en este juicio”, agregó.
—¿Hubo una mención respecto del ex gobernador Hugo Marín?
—El defensor oficial Rodríguez, dijo que estaba discutiendo con su defendido si lo iban a citar o no a Rubén Marín como testigo, esa era la discusión.