El Hospital Lucio Molas de Santa Rosa cuenta a partir de hoy con un nuevo Lactario denominado Laboratorio de Elaboración de Fórmulas (LEF), lo cual implica un salto tecnológico en la atención de este servicio.
Laura Vigliotta, directora Asociada del Hospital, comentó que este nuevo equipamiento tiene que ver con la producción de los biberones y todo lo que utilicen niños y lactantes dentro del Hospital, como también los adultos mayores que reciben alimentación nasogástrica, lo cual se realizará desde ahora con otro tipo de normas de bioseguridad.
Comentó que la Provincia efectuó una importante inversión en la compra de maquinarias, como también en la capacitación del recurso humano, tanto desde lo técnico como en la preparación de las fórmulas y el manejo del personal, para lo que se contó con un gran apoyo de la Fundación Garrahan.
Por último, la doctora remarcó la importancia de la nutrición en la evolución del paciente, “es un equipo que trabaja de manera silenciosa que muchas veces no se tiene en cuenta desde afuera, pero internamente es muy importante”.
Servicio
Guillermina Augustu Gallera, jefa del servicio de Nutrición, comentó que dicho equipamiento se utilizará no solo para los biberones pediátricos sino también para la alimentación enteral, que es la alimentación de adultos a través de una sonda.
“Esto nos permite dar un alimento nutricionalmente adecuado y realmente inocuo, porque la fórmula se elabora en un sistema de homogeneizadora, luego se pasteuriza y seguidamente pasa al biberón. Esto implica crear un servicio nuevo, es un cambio abismal, pasamos a producir como se hace en los grandes centros de referencia”, añadió la jefa del servicio.
En ese sentido consideró que hoy se puedo llegar a este logro “tanto por nuestras ganas, ya que se formó un equipo de trabajo desde hace un año, con personal de servicios generales que fue capacitado durante este tiempo para el manejo de este nuevo equipamiento, y tuvimos todo el apoyo de esta gestión que hizo un gran inversión”.
La doctora expresó que “la alimentación forma parte del tratamiento del paciente igual que otros servicios, por ello insistimos en que tenemos que atender al paciente, pero también hacerlo con excelencia”.
“La producción de biberones varía bastante, ya que en el invierno por ejemplo se duplica, pero estamos entre 500 y 600 biberones por día y llegamos hasta 900”, informó, Gallera quien dijo que es para atender neonatología, pediatría, y los adultos que se alimentan por sonda.
Por su parte, José Collado, representante del Grupo PSE SRL -a cargo de la provisión del equipamiento-, destacó el salto tecnológico que se produce a partir de la instalación de estos nuevos equipos, “incorpora automatismo de control, que hace que los procesos que llevarán adelante sean muy seguros, tanto en cuanto al control nutricional de la fórmula como en el control bacteriológico”.
Esta tecnología está a nivel de las instituciones mas prestigiosas del país. “La consigna es que los chicos estén bien alimentados y seguros en cuanto a contaminaciones y demás”, manifestó.
A modo de cierre, Collado detalló que el equipo está configurado con un pasteurizador, “es un equipo que se ocupa de hacer el tratamiento térmico de la fórmula, una vez que está envasada en su mamadera, se procesa dentro de un pasteurizador el cual eleva la temperatura hasta un determinado punto y luego la enfría en forma rápida, y de esta manera queda lista para el consumo. Se adicionó una homogeneizadora que sirve para desinfectar el agua y reconstituir la leche en polvo con el agua, y desde ahí llenar cada una de las mamaderas o los frascos para el consumo”. Aclaró que esto se denomina proceso terminal, ya que se trabaja con mamadera hermética desde el comienzo hasta el consumo.
