El papa Francisco comenzó a despedirse de Chile en el cierre de su misa en Iquique, al norte del país, desde donde viajará a Perú esta tarde. Desde esa ciudad desértica, el pontífice agradeció la presencia en sus eucaristías a los latinoamericanos que viajaron a este país para verlo, aunque envió un mensaje especial a sus compatriotas.
«Quiero agradecer la presencia de tantos peregrinos de los pueblos hermanos, de Bolivia, Perú y, no se pongan celosos, especialmente de los argentinos, que son mi patria», dijo el Santo Padre hacia el final de la Misa de Nuestra Señora del Carmen, este mediodía, en Iquique.
«Gracias a mis hermanos argentinos que me acompañaron en Santiago, Temuco y acá, en Iquique», agregó.