El presidente Mauricio Macri reunió hoy al centenar de diputados que componen el bloque oficialista del interbloque Juntos para el Cambio en la residencia de Olivos con el objetivo de unir fuerzas y pedirles respaldo en momentos de tensa calma en los mercados luego de la devaluación que siguió a la derrota oficial en las PASO.
La reunión se inició a la 11.30, contó con la presencia del gabinete coordinado por Marcos Peña y tuvo como dato trascendente la exposición del ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, y su defensa de las medidas económicas, incluidas el «reperfilamiento» de la deuda pública anunciado la semana pasada y las restricciones cambiarias efectivizadas el domingo último.
La decisión de enviar al Congreso ese paquete de medidas quedó en espera hasta conseguir consenso con las bancadas de la oposición y los gobernadores peronistas.
«Salgan a la calle a defender lo que se hizo, que fue mucho», pidió el Presidente según testigos de su charla. Y los instó a buscar «el voto-vergüenza», que no figuraba en las encuestas y que terminó en el Frente de Todos y «se puede recuperar», según el primer mandatario. Elogió al «gran equipo» que conforman los diputados y su «unidad». Antes que él, Peña y Rogelio Frigerio también hicieron llamados a «defender» al Gobierno, y priorizar la estabilidad de la economía antes de salir a hacer campaña.
Los encargados de enfrentar a la prensa luego de la reunión fueron Alvaro González (a cargo del bloque Pro por la ausencia de Nicolás Massot), el radical Mario Negri y el «lilito» Juan Manuel López (CC-ARI). «Hoy la prioridad es la estabilidad y la gobernabilidad. La idea es preservar la tranquilidad y que la gente no se levante a la noche pensando que va a perder lo que tiene», afirmó Negri. «Siempre tuvimos estos números (en el Congreso) las leyes que se sacaron fueron por consenso y escuchando a la oposición», dijo Alvarez, y reconoció que Lacunza «ya conversó» con representantes de la oposición para lograr una posición consensuada.