El postulante a ser contador general de la provincia, Adrián García, se vio obligado a admitir que al 30 de noviembre del año anterior las finanzas no estaban tan bien, como se decía desde la saliente administración jorgista; y en contraposición con lo que después fue marcando Carlos Verna advirtiendo que la situación en ese sentido era por lo menos complicada.
García, ante preguntas de diputados de la oposición, pero también del oficialismo, debió reconocer que a esa fecha no estaban “los recursos suficientes para afrontar la totalidad” de los gastos corrientes inmediatos, que incluían sueldos y aguinaldos.
Fueron el radical Ricardo Consiglio, y luego el justicialista Rodolfo Calvo, quienes le preguntaron a Adrián García, quien reconoció que “al 30 de noviembre, si bien Tesorería tenía la previsión para los gastos corrientes inmediatos, como sueldos y aguinaldos, no contaba con los recursos suficientes para afrontar la totalidad de los mismos si tomamos en cuenta que se pensaba otorgar una suma fija de $3.500”, que luego serían $5.000.
García fue consultado en su condición de subcontador general de la provincia, por aquella contradicción entre el gobierno saliente y el entrante. Jorge había dicho en noviembre que dejaba una provincia con recursos y el gobernador Carlos Verna señalaba un panorama totalmente distinto, y hasta se llegó a pensar en algún momento en desdoblar sueldos de la administración pública.
El PJ a favor.
García estuvo ayer en la Comisión de Peticiones y Acuerdos de la Legislatura, donde defendió su postulación para transformarse en contador general de la provincia. Su pliego obtuvo dictamen favorable de la bancada oficialista, en tanto la oposición fijará posición en el recinto.
García, sobre aquella controversia, señaló que no la advertía porque en realidad “el gobierno había informado la verdadera disponibilidad de recursos. Pasa que algunos son fondos o reservas con afectación específica y por lo tanto no se podían destinar a gastos corrientes. Con esos recursos se podía hacer frente al pago de sueldos, pero no se podían cubrir las contingencias como sumas fijas o aguinaldo, que debe solventarse con lo que recaudado en rentas generales”, precisó.
Ley de Contabilidad.
El contador García expresó que creía necesario “un proyecto de modificación de la ley de contabilidad. No me parece efectivo hacer modificaciones sobre la actual, hay que avanzar sobre una ley nueva”, ratificó.
Por otra parte agregó que no considera bueno que se haga “una copia fiel de la ley de Administración Financiera, como hicieron otras provincias, porque ha quedado claro que no la pueden hacer cumplir”.
Dijo que para trabajar en una iniciativa de ese tipo se debe convocar a todos los sectores.
“La mayor dificultad es la antigüedad de nuestro sistema informático, nuestro sistema de sueldos es de la década del 90 y eso nos atrasa muchísimo”, dijo García ofreciendo un dato que no resulta menor y que tendrá que ser tenido muy en cuenta.
“La falta de informatización adecuada hace que no podamos registrar a un docente que se incorpore en una escuela del oeste, porque el alta nos tarda muchísimo en llegar y entonces no cobra lo que trabajó en tiempo ni en forma”.
En ese sentido reveló que “a algunos docentes se les ha pagado hasta un año después de haber bajado de su cargo por lo que tarda en llegar su baja. También las compras de medicamentos que siempre demandan celeridad podríamos hacerlas vía contratación electrónica, lo que nos permitirá también achicar costos”, dijo sobre las ventajas de una modernización.
Sostuvo que eso permitiría “ganar en transparencia”. En este punto el diputado Consiglio recordó que nuestra provincia está penúltima, según el Cipec.
García completó señalando que “han sido sistemas muy fieles y seguros, pero los tiempos cambian y tenemos que renovarnos. El CeSiDa nos puede ayudar y además hacer convenios con provincias más avanzadas que nosotros en ese punto”.
El futuro contador general, hizo referencia a los gastos de personal. “Representan el 50% de los recursos corrientes”, dijo.
Con relación a la libre disponibilidad de las regalías de la que podrán hacer uso los municipios, dijo García que le parecía “una muy buena decisión”.
Sobre la situación de la empresa Montenegro, reveló que el control de Contaduría “se limita al pago de los certificados de obra. No hacemos ningún contralor, ese organismo ha de estar dentro del Ministerio de Obras Públicas”, concluyó.