Un grupo de mujeres jóvenes con hijos reclaman frente a la sede del IPAV por una vivienda propia. Las autoridades se comprometieron a recibirlas. Hay 1000 viviendas sociales para 5000 anotados.
Aliana Silva, una de las mujeres que reclaman soluciones habitacionales en el ingreso al IPAV, en la avenida Argentino Valle, precisó que el grupo de mujeres que están reclamando viviendas sociales viven con otros familiares o alquilan. “La mayoría de las chicas están alquilando. Tenemos muchos problemas y nos cuesta darle de comer a los nenes y acá nos dan una solución”, agregó.
—¿Los atendieron en el Instituto de la Vivienda?
—Sí, nos atendieron y nos dijeron que no entrábamos porque el listado de inscriptos es del 2002 al 2012 y nosotros estábamos desde el 2013. Hay chicas que están desde antes y a algunas se les prometieron casas, pero no se las entregaron.
—¿Cuántos hijos tenés?
—Yo tengo dos y ella, Natalia, también tiene dos. Todas estamos alquilando. Pero ahora le debo el alquiler, porque yo le pago con la asignación. Tampoco tengo para pagar la luz, que son $800.
A mí me dio mucha rabia que nos dijeron que el listado de inscriptos era solo hasta el 2012 y yo estoy desde el 2015. Ahora dicen que no van a hacer más casas, entonces no nos hubieran anotado.
—¿Cómo es tu casa?
—Vivo una casita de barrio. Tengo pieza, cocina y baño. Vivo en el barrio 2001, la casa es chiquita y vivo sola con mis hijos.
Otra de las mujeres que reclama por una vivienda afirmó que comparte un salón con su mamá. “El baño lo comparto con ella”, aclaró.
“Tenemos una audiencia el martes. Necesitamos que nos ayuden. Dicen que van a hacer mil casas y somos once o doce chicas que reclamamos, no les cuesta nada darnos una solución”, señalaron.