El médico veterinario, Rodolfo Casal, lamentó la muerte del puma en la Laguna Don Tomás. Manifestó que lo sucedido debería ser un punto de inflexión para que se conforme un grupo preparado para proceder cuando aparece un animal silvestre. Además, destacó que no se sabrá si el animal llevaba uno o más días ya que “se saben esconder muy bien”.
El martes se informó a la policía que había un puma en la Laguna Don Tomás. Después de un amplio operativo, donde aparecieron efectivos de todas las seccionales, del grupo GEO, como también funcionarios provinciales y municipales, encontraron al animal y después de algunos minutos le dieron muerte.
Entre las personas que llegaron, estuvo el médico veterinario, Rodolfo Casal: “me llamó la directora de Recursos Naturales, Fernanda González, para ponerme al tanto, y como yo soy docente de la Escuela Agrotecnica, fui de ahí a la laguna donde me acerqué para interiorizarme y ahí en los juncales estaba escondida la puma”.
El médico señaló que se empezaron a barajar distintas acciones de lo que se podía hacer con el puma: “yo como naturalista y amante de la fauna, para mí la última alternativa era sacrificar al animal, entonces plantee la posibilidad de usar una red en la cual todos de manera sincrónica nos acercamos y le tiramos la red para después ponerle un tranquilizante”, destacó.
“Cuando hablé de ello, Fernanda González, me dijo que fuera a buscar los elementos, entonces tuve que ir a la veterinaria a buscar lo que necesitaba, y cuando volví a la Laguna, el puma ya estaba muerto. No sé quién tomó la decisión si la Dirección o el grupo Geo de la policía que se acercó al lugar”.
-¿Qué te parece la decisión de matar al animal?
-No me voy a poner de juez para decir si estuvo bien o mal, yo hubiese optado por otra alternativa, quizás sin un buen resultado, eso no lo podemos saber. Lo que he podido observar es que no se ha conformado un grupo para este tipo de problemas que pueden surgir, creo que debe haber un grupo especializado con los elementos adecuados para proceder en estas situaciones, ya que puede aparecer un puma, un ciervo, un jabalí, una víbora, un zorro, un gato montes, y para eso hay que tener los elementos para proceder como corresponde.
Remarcó que él decía de usar la red porque “si le tiraban el dardo y saltaba hacia el agua, se ahogaba, se pudo haber dispuesto de un bote y tirarle desde ahí. Son todas hipótesis para salvar al animal, pero también es un lugar donde va mucha gente y puede ser un peligro”.
-¿Viste a la puma después de morir?
-Sí, abrí la bolsa y pude suponer, no corroborar, que era una hembra en buen estado, tenía todas las garras bien, no presentaba problemas óseos que es típico de puma de cautiverio, incluso, algunas garrapatas lo que me hizo suponer es que era un animal silvestre que llegó a ese lugar.
-¿Cómo pudo llegar un puma a la Laguna?
-No se puede tener certeza, pero ina de las hipótesis más lógica es que por los grandes incendios en La Pampa, hubo un desplazamiento de fauna, probablemente de sus presas habituales y ella llegó hasta el lugar busca su alimento.
-¿Habrá llegado ese martes a la Laguna?
-Uno no lo puede saber si llegó ayer o capaz que tenía más días ahí. Como tiene hábitos crepusculares cuesta verlos y además se saben ocultar perfectamente bien y se pudo haber alimentado de gallaretas, cormoranes, alguna eventual nutria, pero no se puede saber con exactitud.
-¿Qué esperas después de lo que pasó?
-Que este sea el punto de inflexión para que una vez por todas se arme un grupo en el cual no solo esté capacitado, sino con los rifles, las herramientas, las redes o lo que se considere necesario para proteger la población de algún animal silvestre sea o no peligroso, siendo capturado y devuelto a la naturaleza. Los animales no entienden de limites.