En el Allianz Parque de San Pablo, Boca empató 2-2 con Palmeiras y se clasificó a la final de la Copa Libertadores. Los goles del Xeneize fueron convertidos por ‘Wanchope’ Ábila y Dario Benedetto, mientras que para el Verdao, Luan y Gustavo Gómez.
Durante los primeros minutos de juego, los equipos se repartían la tenencia de la pelota. Boca esperaba más retrasado para intentar aprovechar un contraataque, mientras que Palmeiras salió a buscar revertir el resultado adverso con el que se fue de Buenos Aires.
A los 9 minutos, Bruno Henrique convierte para Palmeiras pero antes de la reanudación del partido, el árbitro es advertido desde el VAR de un offside en la jugada y determinó anular el tanto. Sin quedarse atrás, Boca continuó pensando en el arco rival. Seis minutos después, remate de Nández y Pavón llega a desviar el balón pero pasa cerca del palo. El Xeneizeavisaba en San Pablo.
El reloj del Allianz Parque marcaba 17 minutos cuando Ramón Wanchope Ábila le ganó la espalda a su marcador y convierte el primer gol del encuentro tras un centro rasante de Villa. El partido se ponía cuesta arriba para el conjunto brasileño que debía convertir cuatro goles para quedarse con el pase a la final. Aún así, Palmeiras insistiría con llegadas claras hasta el final de la primera etapa pero sin lograr vencer la valla visitante.
En el arranque del segundo tiempo, Palmeiras saltó a la cancha con mayor decisión y jugándose el todo por el todo. Un remate de Lucas Lima exigió a Agustín Rossi que contuvo la pelota. A los 7 minutos, el Verdao empata el encuentro a través de Luan, que ingresando por el fondo de la defensa tras un centro fusila al arquero Xeneize.
Los locales presionaban, el estadio hervía y Boca muy retrasado, sólo lograba aguantar los ataques rivales. Hasta que una pelota entre líneas exige a retroceder rápidamente a Izquierdoz, quién no logra controlar el impulso y derriba en el área a Dudú. Penal para Palmeiras. Gustavo Gómez, aquel central que estuvo cerca de llegar al Xeneize por pedido de Guillermo Barros Schelotto, fue el encargado de cambiar el tiro desde los doce pasos en gol. El resultado se ponía 2-1 para los locales y el equipo dirigido por Felipe Scolari necesitaba dos goles más en los restantes 30 minutos de juego para clasificarse a la final.
A los 17 minutos, Gómez gana en el aire tras un córner y Borja no logra corregir el cabezazo. Otro aviso del conjunto brasileño que generaba nerviosismo entre los jugadores argentinos. Y cuando peor la pasaba Boca en el partido, Dario Benedetto ingresando desde el banco, convierte el empate para el Xeneize con un remate desde afuera del área; similar situación a la resuelta por el jugador en el segundo gol convertido en el partido de ida en La Bombonera.
Seis minutos luego, Zárate estalla el travesaño con un tiro libre desde la derecha. A partir de allí, Palmeiras se volcó completamente al ataque pero sin generar peligro en los metros finales. El final del encuentro sentenció la victoria de Boca y su pase a la final, donde lo espera su clásico rival, River Plate que ayer aseguró su lugar tras la victoria ante Gremio.
Por primera vez en la historia, Boca y River se verán las caras en la final de la Copa Libertadores. El Superclásico del fútbol argentino definirá el torneo continental y tendrá en vilo al mundo entero, que posará sus ojos en este hecho histórico.