Una joven que estaba internada en el Hospital Lucio Molas contó a una organización de ex pacientes que mientras dormía, un efectivo de la fuerza empezó a tocarla. Estaba medicada pero pudo forcejear y evitar que el hombre la violara. La semana pasada, desconocidos sortearon la seguridad de Terapia Intensiva.
El hecho se produjo aun cuando había una guardia femenina en la puerta del sector. Pero la mujer se habría dormido, lo que facilitó el acceso del hombre que abusó de la joven. No hubo acceso carnal porque la víctima logró evitarlo.
En el sector de Psiquiatría destinado a mujeres no escucharon nada porque las usuarias del servicio estaban medicadas. La joven tiene epilepsia refractaria y fue alojada allí porque no tenía dónde vivir.
El abuso fue denunciado por la víctima y tiene intervención el fiscal Cristian Casais.
Este es el segundo problema de seguridad que tiene el hospital Lucio Molas en una semana. El miércoles pasado dos personas intentaron entrar a la habitación de la joven Nadia Lucero, internada en Terapia Intensiva por haber sido salvajemente agredida por su novio, Laureano González.